jueves, 14 de noviembre de 2013

Catedral de San Esteban

Aparte de su importancia cultural, la catedral de San Esteban es naturalmente también una iglesia: Cada día laborable se celebran siete misas y los domingos diez. Especialmente en los días festivos solemnes (Semana Santa, Pentecostés, Navidades, etc.) acuden muchos fieles a la catedral de San Estaban, que está siempre bellamente decorada. Los oficios religiosos de interés general (bodas, misas de difuntos de personalidades importantes, etc.) se transmiten a menudo en directo por televisión. La famosa campana Pummerin se toca para anunciar los oficios festivos en las ocasiones especiales y en los días de fiesta solemne.


La singularidad de esta catedral y los miles de detalles de que está compuesta la convierten en un tesoro histórico-artístico y arquitectónico. Cada detalle tiene su destino, su trasfondo y su historia: altares, puertas, torres, esculturas en las columnas, cuadros, etc. Un incendio dañó gravemente la catedral de San Esteban en los últimos días de la guerra. La catedral destruida quedó cubierta por los escombros y la ceniza. Gracias al esfuerzo de todos se logró reconstruir la catedral en sólo siete años. El emblema nacional y signo de identificación de Austria había vuelto a resurgir de sus cenizas. Pero la catedral de San Esteban tiene que seguir restaurándose con todo esmero para poder conservar este patrimonio cultural para las generaciones
venideras y evitar su ruina.


No hay comentarios:

Publicar un comentario